Tras el principal tirón docente del año, he acabado tropezando con algunas aristas del pasado. Creo que, como hiciera en su momento, pueden ser minutos ideales para abrir o profundizar en debates sobre algunas de las grandes cuestiones que todo ser humano se hace en algún momento de su vida.
Al menos en mi caso, ha sido un lapso de tiempo negociado a los quehaceres diarios muy disfrutado.
- Un emotivo fragmento de Metrópolis (Fritz Lang, 1927; remasterizado 2004) que me sigue sorprendiendo y conmoviento a pesar del paso del tiempo.
- Noche canalla, poema de Javier Egea cantado por Luis Felipe Barrio; y Entra la noche como un trueno, de José Manuel Caballero Bonald.
