En el presente escrito el
autor acomete la tarea de glosar y comentar el Cantar
de los Cantares de manera que, respetando y
aprovechando todas las interpretaciones hasta ahora
propuestas, sirva de introducción a una Cristología con
especial atención a la humanidad del Señor. La obra
está pensada como una profundización gradual o
in
crescendo en el misterio de la
encarnación y, derivadamente, en el sentido del
matrimonio como institución y como sacramento: la glosa
es fácil de leer; el comentario teológico sube el grado
de profundidad en ambos temas a la vez; las
aclaraciones hacen frente a las objeciones eruditas y
de fondo que salen al paso del comentario, y,
finalmente, el anexo que versa sobre el Ser y la
Esencia de Cristo alcanza la altura ontológica que
rinde obsequio racional a tan altísimo misterio.